Con motivo de la publicación de la antología Desahuciados. Crónicas de la crisis, la Internacional Microcuentista y Ediciones Traspiés organizan un concurso de hiperbreves cuyo tema es la crisis.
Bases del concurso:
Con motivo de la publicación de la antología Desahuciados. Crónicas de la crisis, la Internacional Microcuentista y Ediciones Traspiés organizan un concurso de hiperbreves cuyo tema es la crisis.
Bases del concurso:
Sorteamos diez libros y tres ilustraciones originales entre los seguidores de VAGAMUNDOS. LIBROS ILUSTRADOS. participar en el sorteo es muy sencillo, no tienes que hacer absolutamente nada, bueno darle al “Me gusta” de la página, si no lo has hecho ya.
Las ilustraciones que se sortean corresponden a los relatos “Amigos del Facebook” de Miguel Ángel Fraga, “Viaje al paraiso” de Ana Díaz y “El equilibrista” de Adriana Oris y han sido realizadas por Tusitala, Witti y Carmen R. Villa-Real.
No te demores, tienes hasta el 25 de mayo. Corre la voz.
https://www.facebook.com/Vagamundos.LibrosIlustrados
Y pronto, muy pronto el libro.
Casi cien autores, entre escritores e ilustradores, se han unido en Desahuciados para hacer oír su voz, y nos ofrecen a través de sus relatos una visión caleidoscópica sobre los diferentes aspectos de la crisis.
Ángel Olgoso, Care Santos, Eduardo Moga, María José Codés, David Roas, María Zaragoza, Juan Vico, Sergio C. Fangul o José Antonio Masoliver, entre otros, coinciden en la importancia de retomar la literatura de denuncia, de crítica social, sin renunciar por ello a la calidad.
Estas crónicas de la crisis son una invitación a adentrarse en una narrativa que ilumina y emociona a la vez que reconoce la urgente necesidad de tomar partido, de pasar a la acción.
Ángel Olgoso
Los dos hombres caminamos en silencio sobre la tierra caliente y desolada. Nos trasladamos a algún lugar más herboso, una junquera quizá. El aire de la mañana es ya sofocador. El otro, que va delante, tironea de mí valiéndose de la cuerda que me ató al cuello. Cuando siente hambre, nos detenemos. Aferra su cuchillo curvo, desuella una de mis nalgas, extrae varias porciones mollares y cose el festón de piel. Una vez saciado con mi carne viva, continuamos andando. De este modo, precavidamente, sin acceder nunca a ninguna de mis vísceras, adorna las zonas menos huesudas con una extraña caligrafía de cicatrices. Cuando siente sed, basta una diminuta incisión del cuchillo curvo en una vena estratégica para que se provea de mi sangre, situándose debajo con la boca abierta, como los bebedores de lluvia. Noto entonces el corazón más liviano. Él, mostrando en sus movimientos un interés sincero y renovado, presiona otro jirón de tela contra la herida hasta que deja de sangrar. A veces, durante la interminable travesía, creo ver en lontananza un manchón verde, el perfil móvil y ensoñador de un oasis, de un regato, de un espejismo.
Santiago Girón nos envía su trabajo «Burl€$que», una serie de ilustraciones que aborda el tema de la crisis desde un punto de vista crítico y humorístico.