Poemas extraídos de A todo Amor (Editorial Visor, 94 págs., 15€)

MUERTE EN EL OLVIDO

Yo sé que existo
porque tú me imaginas.
Soy alto porque tú me crees
alto, y limpio porque tú me miras
con buenos ojos,
con mirada limpia.
Tu pensamiento me hace
inteligente, y en tu sencilla
ternura, yo soy también sencillo
y bondadoso.
Pero si tú me olvidas
quedaré muerto sin que nadie
lo sepa. Verán viva
mi carne, pero será otro hombre
–oscuro, torpe, malo– el que la habita…

TODO AMOR ES EFÍMERO

Ninguna era tan bella como tú
Durante aquél fugaz momento en que te amaba:
mi vida
entera.

ESO ERA AMOR

Le comenté:
–Me entusiasman tus ojos.
Y ella dijo:
–¿Te gustan solos o con rimel?
–Grandes,
respondí sin dudar.
Y también sin dudar
me los dejó en un plato y se fue a tientas.

EPÍLOGO

Me arrepiento de tanta inútil queja,
de tanta
tentación improcedente.
Son las reglas del juego inapelables
y justifican toda, cualquier pérdida.
Ahora
sólo lo inesperado o lo imposible
podría hacerme llorar:

una resurrección, ninguna muerte.